El rockero argentino, que volverá al Perú en octubre, habla en exclusiva con Peru.com sobre su nuevo álbum, Twitter, rock y los discos.
Lima. “Bohemio” es el nombre del nuevo disco de Andrés Calamaro y la excusa para que visite Lima el próximo 24 de octubre. Antes que “El Salmón” regrese al Perú conversamos con él sobre su nueva criatura musical, su obsesión por grabar canciones y compartirlas en Soundcloud, la radio actual y, obviamente, su transformación en obsesivo tuitero que le ha ganado fama de conflictivo.
¿Qué significa para un artista de tu trayectoria editar un nuevo disco después de tantos años en la carretera?
Un disco, un concierto o una gira, siempre significan algo de lo mismo. La responsabilidad de hacerlo dignamente, con buenas sensaciones y detalles de artista. No bajar la guardia y seguir dando guerra. Estas canciones van a seguir sonando cuando nuestros relojes hayan claudicado.
Siendo un compositor tan prolífico, ¿cuál fue el criterio de selección que usaste para seleccionar las canciones que finalmente están en “Bohemio”, tu nuevo disco?
Elegimos estas canciones con Cachorro López, que dirigió la grabación desde su crédito de productor musical. Él me presentó una selección de canciones sospechadas de poder formar un conjunto conceptual, con sentido y sensibilidad. Canciones adecuadas para acompañarse, para escucharse todas juntas.
¿Cómo se gestó “Bohemio”?
Ocurre que no soy un compositor tradicional, escribo grabando. A veces busco resultados abstractos, otras veces trato de capturar una canción. Pero no vuelvo atrás, me gusta dejar las ideas terminadas o incompletas, y pasar a otra cosa. Con este método recopilé cientos de grabaciones probables para muchos discos hipotéticos. Con las canciones adecuadas, fue cuestión de esperar a los calendarios de Cachorro y grabar.
¿En años de YouTube, Facebook, SoundCloud y demás inventos digitales, aún es necesario editar un disco, sobre todo, en formato físico?
No tanto por el formato físico, la importancia de grabar un disco es existencial, y se complementa con las giras y los repertorios del futuro. Todavía es posible generar ansiedad ante la aparición de un álbum. El público y la crítica esperan los estrenos aunque no hay espacio para las críticas de discos en los periódicos, ni van a sonar completos en la radio ni en la televisión. No hay que permitir que se extingan los discos porque es un formato que nos dio demasiado.
Eres de los artistas que comparte mucha música gratuita a través de SoundCloud, ¿qué tan importante es difundir parte del trabajo que quizás no podrías editar de forma oficial a través de una discográfica?
Es muy importante porque creo en el valor de estas grabaciones. Lo mismo le ocurre al universo de músicos independientes que ofrecen su música en los canales menos habituales, el streaming y los laberintos de la libertad. Las discográficas pueden acompañar otra naturaleza de sonido, pero para un nuevo disco convive el interés genuino del público con el repertorio de las giras y con una cierta sensación de novedad. Un buen principio.
¿Cómo te sientes cuando prendes la radio o pones MTV en la actualidad? Muchos dicen que la música ha perdido su esencia y que ahora no es más que una simple extensión del espectáculo…
La música no perdió nada, quizás perdió terreno en la prensa generalista y en la televisión. Quizás el rock fue desterrado de la cultura del establishment. Y es una extensión del espectáculo. Pero sigue siendo la música un arte distinto, es la alternativa al silencio, algo profundamente espiritual.
Una vez, en la etapa promocional de “Alta Suciedad”, declaraste a MTV que sentías que tú encabezabas la lista de los solistas masculinos en el “Olimpo del rock argentino”. ¿Sigues pensando lo mismo?
Ahora somos menos y lo lamento de verdad. Respeto y admiro a mis compañeros solitarios argentinos. El Indio Solari es el letrista más importante en la actualidad, ahora solo y antes conLos Redonditos de Ricota. Vicentico está grabando sus mejores discos y son muy atractivos.Charly García tiene una discografía formidable y quizás tenga más cosas que decir con la música. Fito Páez no para nunca, siempre está grabando discos importantes, su reciente “Sacrificio” es un buenísimo álbum. Espero que Gustavo Cerati vuelva y me dé una buena patada en el culo. Ojalá Dios exista y lo haga posible.
En Perú, un imitador tuyo tuvo mucho éxito en un programa de canto. ¿Qué opinas de este tipo de formatos, donde un artista es calificado por un grupo de jueces y es el público el que vota si una persona tiene o no tiene talento?
Es de agradecer que el reality pivote sobre los talentos rockeros, los creadores y estos talentos que se proyectan. El reality del Perú es el más “rockista” (sic.) de todos. Incluye otra naturaleza de cantantes para clocar pero también a nosotros. Hay que tener talento para cantar bien en la piel de otro cantante, y hacerlo en un concurso de televisión.
¿Te incomoda que la gente te critique por tus recientes actitudes en Twitter? ¿No temes que tu nivel de artista pueda ser ensombrecido por ingresar a un mundo de farándula y chismes producto de esta relación casi polémica con las redes sociales?
Lo que pasa es que mucha gente vive conectada y no conoce otra cosa, no leyeron libros, no fueron al cine, ni ven los toros: Ven televisión. Comieron tanta mierda que ya creen que es comida. Los que viven en el nano clima de las redes sociales sólo conocen lo que ahí transcurre. Mi vida ocurre en otra parte, en los conciertos, en los tendidos, en mi casa. Grabé dos mil artefactos musicales en doce meses y grabamos un disco mientras ensayábamos para esta gira que visita el Perú próximamente. También frecuento restaurantes, voy al teatro, escribo textos y prólogos que me prestigian, confieso que compro ropa, tomé 18 aviones en 24 días, sin contar mis visitas personales a España. Tengo amigos en la música y la tauromaquia. Tiene sentido que, aquellos que viven embutidos en la realidad virtual, crean en ese Dios pagano e imbécil.
¿Qué significado tiene para ti el público peruano?
Perú es muy generoso conmigo y con mis compañeros del rock argentino. Un público dulce y presente. Nuestros últimos conciertos en el Perú fueron enormes, nos convidaron un enorme entusiasmo, realmente le gusta el rock que hacemos, nos esperan con ilusión y pagan para ver y escuchar un recital francamente bueno.
Por: Juan Carlos Cabrera / @fugazvolatil