«ensayamos, todas las tardes, en la tradicional sala de ensayos del barrio tetuan, que fuera testigo de los origenes de rodriguez y de muchas tardes, dias enteros, de amistad, de musica, de curtiembre, de tiempo … esas paredes vieron pasar muchos años de mi vida …
son de esas paredes que hablan, pero saben ser discretas y nobles … muchas cosas siguen iguales en T25 y los ausentes estan , apenas invisibles, entre las mesas del barcito, en los pasillos, ensayando con nosotros … los mosqueteros estan mas afilados que nunca y las guitarras son un festival de fluidez, tradicion, blues power y virtuosismo con feeling (menos la mia propia que es conceptual apenas) … vuelvo cansado, pero contento, a mi room service life … al mediodia prefiero en embassy, me gusta rodearme de tradicion y elegancia hasta el punto de sentirme incomodo».
A.C.