Andrés Calamaro presenta en ‘Hoy por hoy’ con Gemma Nierga su libro ‘Paracaídas y vueltas’
Imposible quedarse indiferente. Quizás sea de forma inconsciente pero cada vez que habla, Andrés Calamaro revuelve los estándares de lo políticamente correcto y genera debate. En esta ocasión, en la entrevista que le ha realizado Gemma Nierga Nierga en Hoy por hoy, Calamaro ha vuelto sobre un tema que ya le costó más de un disgusto en 2012: la historia del supuesto asesinato que cometió en el Madrid de los años 80.
Según el relato, que aparece ampliado en su libro «Paracaídas y vueltas», Calamaro se habría peleado con un «yonqui» en el barrio de Malasaña y le habría matado al golpearle en la cabeza con un bordillo. Tras el revuelo causado en 2012, los representantes del artista tuvieron que salir a desmentirlo y aclarar que se trataba de un homenaje artístico «inspirado en la canción ‘I shot the sheriff’ de Bob Marley».
Pero en su charla con la periodista catalana, Calamaro ha reincidido en el tema y en la posibilidad de matar a alguien: «Me hubiera gustado decir que sí, que era verdad» ha asegurado el músico argentino que para justificarse ha utilizado el símil del león que mata a una cebra para alimentar a sus hijos. «No es asesinato, no es cruel ni es sanguinario, es el tipo (sic) buscando su comida. Desde ese punto de vista me parece interesante la hipótesis de quitarle la vida a otra persona» ha afirmado.
La discusión no ha quedado ahí. Cuando Gemma Nierga le ha preguntado si no le parece mal «arrebatar la vida a otra persona», Calamaro ha fabulado con la creencia de que «vivimos siete veces, y una de esas vidas somos asesinos». También, cuando la directora de Hoy por hoy le ha recordado una de las frases del padre de la patria argentina José de San Martín, “Humanizar el carácter y hacerlo sensible, aún con los insectos que nos perjudican”, el ex-líder de ‘Los Rodriguez’, ha respondido que no es una contradicción ya que «los héroes matan para liberarnos».
El clima relajado y cálido de la entrevista en Hoy por hoy, a la que Andrés Calamaro ha acudido para presentar su primer libro en el que recoge una colección de textos y reflexiones escritos durante los últimos años, ha permitido que el músico abordara otras cuestiones no menos polémicas. Como gran defensor de la tauromaquia, el bonaerense se ha referido a la polémica por la prohibición en Cataluñade las corridas de toros asegurando que también la gente se polariza «frente al comunismo o las sustancias prohibidas» y que el arte de la lidia lo defienden personalidades como Vargas Llosa o Fernando Sabater.
Los toros en Cataluña y la posibilidad de que la plaza de la Monumental de Barcelona se convierta en una mezquita ha provocado que Calamaro entrara en otro «jardín» que sin duda generará muchos comentarios. El autor de «Alta suciedad» ha asegurado que, a diferencia de los que rezan el Corán «lo mío es tolerancia». «Yo como ateo soy tolerante con todas las religiones y como tengo sangre judía y palestina en mis venas me considero con derecho de opinar con sentido del humor sobre estas cuestiones» ha contestado Calamaro. Eso sí, «siempre y cuando» ha seguido ya con cierto sentido del humor «mientras eso no sea una amenaza para mi integridad física y pueda seguir comprando discos».
Más allá de las polémicas, el genio del rock sigue siendo un torrente de pensamientos e ideas, de las que ahora podremos disfrutar por partida doble gracias a esta nueva faceta literaria. Pero Calamaro no abandona la música. De hecho, habrá que estar atentos a una de las citas más importantes de este verano: será el 11 de Julio cuando el argentino se suba al escenario junto al mítico Bob Dylan en el concierto que este ofrecerá en San Sebastián y que supondrá su reencuentro 16 años después de que Calamaro hiciera de telonero en su gira por España de 1999.